Con la temporada suspendida por la pandemia del Coronavirus y la incertidumbre sobre si se podrá reanudar, es el momento de recordar uno de los hechos históricos que se vivió en la NBA un 3 de abril de 2011 y que terminó por ser un hito en la Liga.

 

Tan solo le bastaron tres años a Derrick Rose para cautivar todas las miradas de los fanáticos de la NBA y lograr una hazaña que, hasta ese entonces, se mantenía poco probable de superar. A los 22 años logró una votación unánime para ser el Jugador Más Valioso de la temporada.

El base de los Chicago Bulls pasó a ser el jugador más joven en ganar el MVP y fue pieza fundamental para su equipo terminara la temporada regular con una marca de 62 victorias y 20 derrotas. Por juego promedió 25 puntos, 4.1 rebotes y 7.7 asistencias.

“Trabajé muy duro en mi juego, especialmente durante el verano. Dediqué todo mi verano al baloncesto. Aunque fue difícil, lo hice”, afirmó Rose cuando recibió el premio. En la votación les ganó a grandes nombres de la NBA como: Kevin Durant, Kobe Bryant y LeBron James.

 

 

Al ser el segundo jugador de los Chicago Bulls en ganar esta distinción en ese momento lo compararon con Michael Jordan: “Ni siquiera me estoy acercando a ese hombre, estoy muy lejos de él. Sería excelente estar más cerca de él”, concluyó Derrick Rose.