A pesar de que los Dallas Cowboys siguen perdiendo y dándoles oportunidades para tomar el primer lugar de la división, los Philadelphia Eagles no han tomado una sola de ellas. El equipo dirigido por Doug Pederson lleva tres derrotas consecutivas y sus chances de clasificarse a Playoffs son cada vez menores.

Por si llevar tres semanas sin ganar fuera poco, la última caída fue un estrepitoso resultado ante los Miami Dolphins, que venían con marca de 2-9 al momento de recibir a los campeones del Super Bowl LII. Por eso, tras un escandaloso 37-31, a pesar de haber estado 28-14 al comienzo del tercer cuarto, los fanáticos comenzaron a hacer todo tipo de exigencias.

Si bien el pedido inmediato de muchos fue que despidan a Pederson, un grupo parece haber llevado las cosas más allá y realizó un increíble pedido: “Hagan que los Eagles caminen a casa desde Miami”.

La desopilante petición fue subida a thepetitionsite.com por el usuario @PHLEaglesNation y, al cierre de esta edición, lleva más de 7.500 firmas.

En su descripción, el peticionante asegura: “Los Eagles son una absoluta vergüenza y nos han manchado durante toda la temporada. Merecen ser castigados y no deberían permitirles volver a casa en la comodidad de un vuelo”.

Parece demasiado para un plantel que se ganó el amor de la ciudad hace solo dos años cuando levantó el trofeo Vince Lombardi con una gran mayoría de los jugadores que integran el roster actual y un equipo de entrenadores similar, también liderado por Pederson.

Por supuesto que, por más que la petición hubiera llegado a millones de firmas, los Eagles no iban (y no lo hicieron) a volver caminando a casa. Sin embargo, tal vez el problema no sea cómo volver a la Ciudad del Amor Fraternal, sino que el hecho mismo de regresar a mostrarse ante un público que ya tiene poco de amoroso, seguramente sea suficientemente traumático.

Philadelphia sigue segundo en la NFC Este por detrás de Dallas (6-6) con marca de 5-7 y, si bien le sobran las chances matemáticas para pasar, la realidad parece mostrar que es un pálido equipo y que, aún si logra clasificarse, no tiene prácticamente ninguna oportunidad de competir por el título.