Argentina estaba siendo dominada por Uruguay, donde Dibu Martínez había evitado el primer gol del conjunto dirigido por Tabárez, cuando le tapó el gol a Nahitan Nández. Y en la respuesta, Ángel Di María dio un master class de cómo hay que definir.

En el clásico del Río de la Plata, a los 7 minutos, el extremo de PSG entró al área y casi no le dio recorrido a la pierna a su pierna izquierda para que, como si fuese con un guante, la colgara del ángulo derecho del arco defendido por Fernando Muslera.

Después de 4 meses y dos días, Ángel Di María volvió a convertir un gol con la camiseta de la Selección Argentina, ya que el último había sido frente a Brasil, en la final de la Copa América.