Sin duda alguna que el mundial de Rusia 2018 fue muy doloroso para la Selección Argentina. De hecho, alcanzar el pasaje a la máxima cita futbolística ya fue una gran complicación. Pero con el campeonato por delante, el pueblo argentino creyó que el combinado nacional, comandado por Jorge Sampaoli y que tenía a Lionel Messi entre sus filas, podía revertir la cuestión.

Pero fue todo lo contrario. Argentina no jugó bien, accedió a octavos de final con el último suspiro, entrando por la ventana después de un agónico triunfo frente a Nigeria y, cuando llegaron los duelos mano a mano, se topó con Francia. Los dirigidos por Didier Deschamps fueron completamente superiores a los de Sampaoli y el sueño de ver a Messi levantando la Copa del Mundo quedó trunco.

Después de tres años, la Pulga y el entrenador se volvieron a ver las caras. Fue en el clásico francés, donde Olympique de Marsella y PSG igualaron sin goles. “Nos saludamos normal. En este momento somos rivales, pero en otro momento fuimos compañeros, así que solo eso. El respeto de siempre”, expresó Sampaoli en una nota con ESPN.

A pesar de que Sampa no quiso entrar en detalles, no fue una grata situación para Messi, Ángel Di María y el propio entrenador, ya que después de Rusia 2018 no se volvieron a dirigir la palabra. Y como si fuera poco, la relación estaba rota dentro de la cita mundialista.