Este domingo se llevó a cabo una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino entre River Plate y Boca Juniors y fue el primero que se juega con público desde el inicio de la pandemia del Covid-19, en un estadio Monumental que aunque tenía permiso de ingresar 36 mil espectadores, se calcula que entraron casi 60 mil.
El desarrollo del juego fue siempre favorable al equipo millonario ya que los xeneizes se quedaron con un hombre menos ya que a los 16 minutos el árbitro del encuentro expulsó a Marcos Rojo y así tuvieron que soportar los avances de un club que buscaba la victoria para ser los únicos líderes del fútbol argentino.
En ese primer tiempo, aprovechando que todo venía en contra para Boca, River logró hacer la diferencia con dos goles del delantero Julián Álvarez, convocado a la Selección Argentina, y una de las joyas que tiene el fútbol gaucho para los próximos años. Un remate de media distancia y otro trasjugada elaborada fueron suficientes.
Pero la guinda del pastel pudo ser un golazo de Jorge Carrascal, el colombiano que fue suplente pero ingresó en el mismo primer tiempo, y tras un contragolpe letal todo quedó servido para que el 10 venciera a Agustín Rossi. Sin embargo, el intento de pasarla la pelota por encima no fue efectivo.
Al final, River terminó ganando solo por un gol ya que a los 93 minutos Boca descontó con un gol de Carlos Zambrano y no reflejó en el marcador la amplia superioridad. Obvio, de eso se pegaron para pegarle a Carrascal que no tuvo un buen partido y falló lo que iba a ser el 3-0 para los Millonarios.