A los 35 años, Diego De La Torre se retiró como futbolista profesional y ya tiene decidido ser entrenador, aunque antes repasó su extensa trayectoria en el mano a mano con Marca Claro.

"Estoy contento, feliz de haber estado tantos años en la Primera División y en el Ascenso. Desde que debuté hasta que me fui al Ascenso fueron 13 años, más dos en Atlético Mexiquense y dos más con Cafetaleros. Una carrera de 17 años bastante gloriosa; estoy muy contento con lo que logré y con lo que hice", expresó.

"Me retira una lesión, estaba muy cerca de volver a jugar pero la rodilla ya no me dejó, me hago a un lado y quiero disfrutar la vida como es, camino bien pero no puedo hacer ejercicio de alto rendimiento", añadió acerca de su estado de salud.

Además, confesó cómo empezó a darse cuenta de que tenía que abandonar la actividad profesional: "Avilés Hurtado me hace un recorte y yo me atoro con los tachos, nadie me tocó, se me atoró el zapato y se rompió todo. A partir de ahí volví a jugar, después de esa lesión descendimos con Jaguares, voy a jugar con Cafetaleros, me recupero bien y ascendemos pero no nos dejaron y seis meses después me volví a romper; llevo tres operaciones en nueve meses que ya me dejan fuera totalmente de todo".

"Fueron pocos minutos, sólo tres, pero te pasan mil cosas por la cabeza, desde la emoción y las ganas de llorar... Empiezas creyendo que a partir de ahí viene una carrera de siempre jugar y no, tienes caídas y subidas, si no te mantienes en un nivel óptimo en ese momento bajas", se sinceró.

De La Torre hizo una diferencia entre las exigencias en los conjuntos en los que jugó: "En lo personal me iba bien pero me tocó descender con los dos, eran otras circunstancias. En Toluca la obligación era ser campeón, allá era salvar al equipo. Con Querétaro no se pudo y con Jaguares era la misma situación".

Por último, recordó con gratitud los trofeos que pudo obtener dentro de la cancha: "No hay nada mejor que ganar un campeonato, en 2005 no me toca vivirlo tanto, fui banca y contra Monterrey no viajé; pero sí festeje con el equipo y me siento parte de pero. Para mí el mejor fue el 2008 porque hasta tiré penal contra Cruz Azul y era parte de algo bueno, fue ese campeonato que viví al cien".

En total fueron dos etapas con los Diablos Rojos: 2004-2009, con 117 partidos y 10 goles; y 2010-2012, con 35 cotejos y 1 tanto.