España se encuentra siendo azotada, de forma implacable, por una ola de frío compuesta por una impiadosa tormenta de nieve. Fundamentalmente ciudades como Madrid, la capital, por lo que hubo que suspender algunas actividades.

Entre otras cosas, no se pudo desarrollar el partido de Atlético de Madrid, el líder que tiene la máxima categoría del fútbol español. Inclusive también estuvo en duda el partido que Real Madrid tenía que afrontar como visitante de Osasuna.

Sin embargo, luego de mucho delibrar, los comandados estratégicamente por Zinedine Zidane pudieron salir al campo de juego de El Sadar, en Pamplona, con la misión de aprovechar el contexto para treparse a lo más alto de La Liga de España.

En esta oportunidad, el Merengue, que también vislumbra lo que serán los octavos de final de la UEFA Champions League en un tiempo, debió encontrarse frente a frente con un elenco que viene diseñando una campaña muy adversa.

Bajo esa órbita, todos los pronósticos auguraban una victoria tranquila del visitante. De todas maneras, lo cierto es que el primer tiempo no expuso demasiadas luces y mucho menos situaciones de gol, por lo que el juego culminó empatado 0-0.

Lamentablemente, la etapa complementaria no fue muy diferente. Real Madrid intentó adueñarse de la pelota y manejar los tiempos, pero lo cierto es que no tuvo grandes argumentos como para lastimar en demasía a los anfitriones.

Como consecuencia de ello, el encuentro culminó con un empate sin anotaciones. De esta manera, los de Zidane no lograron adueñarse de lo más alto de la tabla de posiciones. Eso sí: le anularon dos goles de manera justa.