Hasta ahora, todo había sido positivismo y grandes cifras en Nintendo. Apesar de que el mundo se sumergió en una crisis por la pandemia del Coronavirus, el confinamiento de millones de personas generó un efecto colateral que aumentó de forma imprevista la venta de consolas y videojuegos. La Nintendo Switch se agotó en todo el planeta y uno de sus juegos se posicionó como tendencia durante este duro momento: el Animal Crossing: New Horizons.

Sin embargo, los efectos de este duro momento para la humanidad, en temas sanitarios, sí golpearía a Nintendo en un futuro próximo. Su presidente, Shuntaro Furukawa, aseguró que la manufactura de componentes que hacen parte de la Switch, y que se crean en China, empezó a reducirse sensiblemente ya que las personas encargadas de este proceso están en casa cuidándose del Covid-19 y no en su lugar de trabajo.

En la actualidad, hay gran demanda en el mercado global de la consola Nintendo Switch y el dirigente aseguró que la empresa no pudo producir la cantidad esperada de máquinas para distribuir porque no había la cantidad necesaria de componentes para cumplir con la meta de producción. En la medida que la situación se mantenga, ese coletazo en la baja producción se sentira en un futuro y no de inmediato. Además, el desarrollo de videojuegos también se vería afectado y la presentación de nuevos títulos se retrasaría por "limitaciones del modelo de trabajo desde casa".