La salud mental han sido uno de los temas de mayor relevancia que se han tocado en los Juegos Olímpicos de Tokio. El caso de Simone Biles ha abierto debates respecto a los problemas psicológicos y la presión que hay alrededor de los atletas. En este sentido, ha surgido un nuevo caso y apunta a los deportistas chinos, quienes sufren de ataques por parte de nacionalistas de su país, incluso por quedarse con la medalla de plata.

De acuerdo a la información de la BBC, los atletas chinos han sido acusados por los nacionalistas por ser "antipatriotas", al no lograr triunfos olímpicos. La fiebre "ultranacionalista" ha llevado a que muchos fanáticos impongan condiciones respecto al éxito de un deportista o no. En plataformas de redes sociales de aquel país, como Weibo, se acusa a los atletas de "fallar a la nación".

Un estudio de caso mostrado por el citado medio es el de la pareja del Dobles Mixto en Tenis de Mesa compuesta por Xu Xin y Liu Shiwen, quiens perdieron la final ante Japón. De hecho, los propios jugadores han mostrado su decepción por el resultado. "Siento que le he fallado al equipo, perdón a todos", dijo Shiwen, mientras que Xu Xin apuntó: "Todo el país esperaba con ansias esta final. Creo que todo el equipo chino no puede aceptar este resultado".

No fueron los únicos atletas que han sufrido una derrota decepcionante. Li Junhui y Liu Yuchen también perdieron su final de dobles en Bádminton ante Taiwán. Y han sido víctimas de varios insultos y comentarios negativos: "¿No están despiertos? No hicieron ningún esfuerzo. ¡Qué mierda!", se leyó en plataforma Weibo.

Y así hay varios casos de atletas chinos que han sufrido las consecuencias de los fanáticos "nacionalistas", quienes no toleran una derrota china en los Juegos Olímpicos, ni tampoco celebran que un rival como Japón o Taiwán se lleve la victoria, sobre todo por los resentimientos que hay hacia estos países como parte de sus enfrentamientos en la historia reciente.