Nueve temporadas de infracciones, más de 100 normas violadas y un efecto dominó que puede terminar de la peor de las formas. Así se viven las primeras horas luego de que desde la Premier League anunciasen el final de una investigación que puede cambiar el panorama del fútbol ingles tal y como lo conocemos. Los rivales del Manchester City piden que en caso de culpabilidad, los del Etihad sean automáticamente descendidos a segunda división.
La Comisión Independiente de la Premier League ya se hace cargo de un proceso que parte de una investigación de más de cuatro años que empieza a dejar sus primeras consecuencias. Las fallas y maniobras del club Skyblue a lo largo de 9 temporadas hicieron saltar todas las alarmas de un torneo donde se registraron, tal y como apunta el comunicado del ente, violaciones de normas del control económico, del mercado de fichajes, de remuneración a entrenados y de la cooperación que los clubes tuvieron que tener con los entes durante las temporadas del Covid-19. Sumado a esto, se registran presupuestos o patrocinios inflados que provienen desde Abu-Dabi.
“Nosotros preferimos gastar en un batallón de abogados que en cumplir las normas que existen”, palabras de hace unos años por parte de Sheikh Mansour y Khaldoon Al Mubarak que como máximas cabezas del Manchester City, vuelven a la vida mientras desde el Reino Unido avisan que si bien el proceso no será ni mucho menos rápido, todos piden por soluciones de peso para evitar que se siga rompiendo la balanza de una liga con cada vez más dinero y distancias entre sus clubes.
Sheikh Mansour y Khaldoon Al Mubarak: Getty
Se pide el descenso
“Si se prueban estos cargos, debe haber un castigo adecuado, y el único apropiado es que sean relegados. Estamos hablando de una década de presuntos abusos y queremos que la Premier League haga lo correcto”, declaraciones de diversos presidentes de los clubes del fútbol inglés alrededor de la trama del año en Reino Unido que son recogidas por The Sun.
La situación se viene caldeando con el correr de las horas, a tal punto que los entes reguladores del fútbol inglés ya reciben quejas formales de quienes compiten con Manchester City en cada semana: “Los clubes de la Premier League exigen sangre y un veredicto rápido. Y un castigo antes del final de la temporada”.
Inglaterra arde con el inicio de un proceso donde las sanciones pueden ir, según apuntan los reglamentos de la Premier, desde multas económicas, deportivas (puntos), descenso, inhabilitación de los dueños del club y hasta la expulsión del torneo para un Manchester City que pronto comenzará a defensa jurídica más importante de su historia moderna. Clave remarcar que a diferencia de lo que ocurre en territorio UEFA con el TAD, aquí no habrá posibilidad de apelar a las medidas que se tomen desde el Comité Independiente.
