No cabe duda toda la atención que Michael Jordan generaba en la National Basketball Association (NBA) y fuera de ella. Chicago Bulls estableció una época dorada que se veía a lo largo y ancho de los Estados Unidos, y más allá de las fronteras norteamericanas.

6 anillos, un estilo de juego increíble y una personalidad bastante particular consagraron a 'MJ' como uno de los mejores jugadores que ha pasado por el baloncesto estadounidense, tanto así que es considerado por muchos como el mejor de todos los tiempos.

Millones de aficionados querían ver a Jordan haciendo de las suyas, combinándose con Scottie Pippen, Denis Rodman, Steve Kerr y todos los jugadors que formaron parte de la generación dorada de Chicago Bulls en la NBA.

El día que la MLB pudo más que Michael Jordan

Definir qué deporte agrada más a los norteamericanos es complicado. Algunos afirman que es, sin duda alguna, la NFL. Por otro lado, la NBA y MLB también alcanzan niveles increíbles de audiencia y reúnen a millones de fanáticos.

Justamente y como dato curioso, el Juego 6 de Las Finales de la NBA 1998 entre Chicago Bulls y Utah Jazz aparece en los libros históricos como el partido con más audiencia registrada (35.9 millones).

Sin embargo, ese registro quedó atrás gracias a la Serie Mundial de la MLB, aunque en 2016 con 40.9 millones de espectadores durante el Juego 7 entre Chicago Cubs y Cleveland Guardians (Indians en aquel entonces).