Más allá de que la National Basketball Association (NBA) confirmara de que los jugadores no están obligados a vacunarse contra el Coronavirus, las autoridades de ciudades como Nueva York y San Francisco impedirán que aquellos no inmunizados puedan jugar en sus Estados, siendo uno de los perjudicados Golden State Warriors.
De cara a una temporada 2021-22 que será importante para su proyecto, tomando en cuenta la vuelta de dos jugadores claves en su historia como Andre Iguodala y Klay Thompson, tras una seria lesión, el equipo de Stephen Curry no podrá contar con una de sus figuras, en caso de mantenerse estas normativas sanitarias.
Según informó Rusty Simmons, periodista del San Francisco Chronicle, el jugador de los Warriors que optó por no vacunarse, por decisión personal, podría no disputar sus duelos de local en Chase Center, lo que implicaría verse obligado a perder $350 mil dólares por cada partido que no juegue.
La figura de Warriors que no quiere vacunarse
La información asegura que el rebelde que no está dispuesto a inocularse es el alero canadiense Andrew Wiggins, quien podría apelar a una solución temporal para poder jugar en San Francisco y Nueva York, que sería la llamada "excepción religiosa".
"Estamos trabajando en el asunto de las exenciones por motivos religiosos; estamos hablando con muchos negocios y con el mundo del entretenimiento para ver cuáles son nuestros siguientes pasos al respecto. Pronto ofreceremos más información sobre este tema", informaron desde el Departamento de Salud Pública de San Francisco por el caso de la estrella de los Warriors.
La pasada temporada, la primera con Golden State, el jugador con pasado en Minnesota Timberwolves promedió por partido 18.6 puntos, 4.9 rebotes y 2.4 asistencias, con un 47,7 por ciento de tiros y un 38,0 por ciento desde lo profundo.
