Lo que vimos la noche de este jueves en los Playoffs de la National Basketball Association (NBA) fue sencillamente increíble. Cómo poder explicar que Memphis Grizzlies tenía prácticamente el Juego 3 perdido en casa de Minnesota Timberwolves y pasar a ganar la serie por 2-1.

Cuesta entenderlo, pero hay que poner los antecedentes sobre la mesa. Por ejemplo, el fuerte arranque del equipo local, con Patrick Beverley luciendo como en sus mejores años, les llevó a tener una ventaja de 47-21, es decir, 26 tantos de ventaja, el cual la visita logró recordar hasta una diferencia de ocho puntos en contra.

Pero hubo más, en el tercer cuarto los Timberwolves volvieron a pasar el rodillo y faltando tres minutos para el final de este lapso, volvieron a tener un amplio marcador favorable, en este caso de 25 puntos, por 79-54, un escenario más que imposible para los Grizzlies.

La mayor remontada en la historia de Grizzlies en Playoffs
 

El equipo dirigido por Taylor Jenkins se mostró rebelde en el Target Center, y logró conseguir poner un parcial de 29-4 en el tramo final del juego, para poner un total de 54-16, y así finalmente conseguir la mayor remontada de su historia en Playoffs, y una de las más grandes de la Postemporada.

Para ello, los Grizzlies contaron con el primer triple doble en NBA Playoffs para Ja Morant, con 16 puntos, 10 asistencias y 10 rebotes; además de los 26 tantos y 7 triples de Desmond Bane, para firmar la victoria por ante Timberwolves por 104-95, dejando el ambiente caliente para el Juego 4, que se disputará el sábado por la noche en Minnesota.