Es difícil de explicar, pero a veces hay jugadores que reciben un cierto maltrato o no tienen el mismo respeto que otros por diferentes motivos. En la NBA pasa mucho, y es el caso de James Harden, quien ha sido uno de los mejores jugadores de los últimos 10 años.

Desde ser la tercera opción en Oklahoma City Thunder, donde fue uno de los mejores sextos hombres de la NBA, a ganar el MVP de temporada regular con Houston Rockets en 2018 y a donde está ahora, en un letal big 3 en Brooklyn Nets junto a Kevin Durant y Kyrie Irving, Harden siempre fue un gran anotador.

Pero, lo que tiene distinto al resto, lo que lo hace tan especial, es su forma de jugar. Harden juega estacionado, sin moverse si no tiene el balón, pero cuando lo tiene va a tirar un triple o va a penetrar para pasársela a un compañero con su gran visión o intentar una bandeja. Y faltas. La Barba es el que mejor sabe cómo sacarle infracciones a sus rivales.

James Harden y los tiros libres en la NBA

Es por eso que molesta, y hay una gran estadística que lo demuestra. En su carrera ha anotado más tiros libres (6.574) que tiros de campo (6.513) algo que ningún otro jugador de ese calibre ha podido hacer. Es increíblemente admirable para algunos, pero muy detestable para otros, y de ahí sale el debate.

Para comparación, Michael Jordan tiene 5.590 tiros de campo más que TL, LeBron James 5.395, Kobe Bryant 4.035 y Kevin Durant 2.219. No están ni cerca de lo que ha logrado el barbudo. Aunque se lo odie o se lo ame, hay que respetarlo porque supo mejor que nadie como aprovechar las infracciones en la NBA y explotarlas al máximo.

Lo más leído: