Parecía una derrota inminente. Sin embargo, Golden State Warriors reacomodó el rumbo ante Philadelphia 76ers en la National Basketball Association (NBA) y se adjudicó una remontada épica para triunfar 116-96, en casa.

Por supuesto, para que esto sucediera apareció la mejor versión de Stephen Curry, el jugador más punzante que Steve Kerr tiene a disposición, pues se marchó con 25 puntos, 10 asistencias y 4 rebotes en 35 minutos de acción.

Por otro lado, la actuación de Jordan Poole también jugó un papel fundamental en la victoria del quinteto de la Bahía. 17 unidades, 6 asistencias y 5 rebotes en 33 minutos sobre la duela fueron sus números para contribuir en la remontada.

Jordan Poole a lo Stephen Curry

De esos 17 puntos que anotó, tres llegaron por la vía del triple. sin embargo, no fue un disparo cualquiera, dado que Jordan Poole tomó el traje de Stephen Curry para hacer levantar a todos los aficionados de sus asientos tras lanzar el balón desde cancha propia.

Los fanáticos presentes en el Chase Center no podían creer lo que había sucedido. Antes de finalizar el segundo cuarto, Poole aventó el esférico hacia el canasto, y a medida que se acercaba a su objetivo la tensión y expectativa aumentaba.