Llega a ser increíble la mala suerte que está persiguiendo a Dallas Cowboys durante este 2021, ya que durante la pretemporada sufrió un brote de siete contagios por Coronavirus, la suspensión de un jugador por dopaje y ahora perderá por tiempo indefinido a una de sus figuras para lo que resta de la temporada en National Football League (NFL).
Luego de su estreno en el certamen, con derrota por 29-31 ante Tampa Bay Buccaneers, el equipo dirigido por Mike McCarthy ha perdido a cuatro de sus jugadores titulares: el receptor abierto Michael Gallup, por lesión en pantorrilla; el tackle derecho La'el Collins, suspendido cinco juegos por violar la política de abuso de sustancias de la liga; y el ala defensiva Randy Gregory, por COVID-19.
A ello, se ha sumado en los Cowboys el defensor DeMarcus Lawrence, que en la práctica de este miércoles sufrió una fractura en su pie derecho, y se espera que esté fuera de la temporada regular en NFL por un plazo entre seis y ocho semanas, aunque hay versiones que apuntan a su marginación por tiempo indefinido.
Dallas Cowboys y su "mala suerte" en NFL 2021
Pensando en el juego del próximo domingo 19 de septiembre, cuando visiten a Los Angeles Chargers, dentro de la franquicia de Texas corre la preocupación, tomando en cuenta que han perdido a sus dos caza mariscales de campo para contener a un inspirado Justin Herbert.
Recordemos que en la pasada temporada de NFL, los Cowboys terminaron terceros en la División Este de la Conferencia Nacional, con récord de seis triunfos y 10 derrotas, y que no clasifican a la Postemporada desde el 2018, cuando perdieron en la definición divisional ante Los Angeles Rams por 30-32.
