El camino al Super Bowl LVI que se jugará el domingo 13 de febrero de 2022 en el SoFi Stadium de Los Angeles, California, tiene todavía muchos capítulos por recorrer en la temporada de la National Football Association (NFL) y todavía está sujeto a sorpresas.
Los candidatos podrán ser los Green Bay Packers, Tampa Bay Buccaneers o Kansas City Chiefs, pero otros equipos acechan y, como Philadelphia Eagles en 2018, las franquicias tapadas pueden dar un gran golpe, y una de ellas es la de Minnesota Vikings.
Los Vikings están 6-7 en la temporada, segundos en la NFC Norte y al acecho de un puesto de wild card en la Conferencia Nacional. Su defensiva sufre de altibajos, sostenido por un ataque muy balanceado con varias figuras. El corredor Dalvin Cook, y los receptores Adam Thielen y Justin Jefferson.
Justin Jefferson, el alma letal de Minnesota Vikings
Apenas en su segundo año en la liga, Jefferson ya es un WR top 5 de la NFL y su crecimiento a pasos agigantados puede ser la clave para el éxito de su equipo. Está segundo en yardas aéreas y es posible que sea el mejor receptor con apenas dos años de experiencia en la historia... o al menos está cerca.
El dato que lo demuestra es que es apenas el tercer jugador en la historia de la NFL con más de 1.250 yardas por aire en cada una de sus dos primeras temporadas, uniéndose a Randy Moss, el receptor miembro del Salón de la Fama, y Odell Beckham Jr.
