Para Aaron Rodgers no hay medias tintas cuando se habla de lo que será la próxima temporada y los objetivos que tiene con los Green Bay Packers. Una vez superada la polémica entre el jugador y el equipo, el mariscal de campo está enfocado en estar a tope para el inicio de la NFL que arranca el 9 de septiembre.

El experimentado jugador, que disputará su temporada 17 en la National Football League todas ellas con los Packers, es la principal figura de Green Bay que se encomienda a lo que pueda hacer el actual MVP de la NFL para llevarlos de nuevo a lo más alto y conquistar el Super Bowl, algo que no hacen desde el 2011.

El mariscal de campo no ha participado en los primeros dos encuentros de preparación en esta pretemporada que los Packers saldaron con derrotas ante los Houston Texans (26-7) y los New York Jets (23-14). Tampoco se espera que juegue este sábado ante los Buffalo Bills en el cierre de la pretemporada, pero si cuentan con él para el comienzo de la temporada.

Todo o nada

Así resume Aaron Rodgers lo que será la temporada que está por empezar de la National Football League en la que intentará darle a los Green Bay Packers su quinto título de Super Bowl. Para el mariscal de campo cualquier otra cosa que no sea conseguir el anillo de campeón será un estrepitoso fracaso.

"Si no ganamos el campeonato la temporada habrá sido una decepción", aseguró tajante Rodgers en una declaraciones a Michael David Smith de Pro Football Talk. "Se espera que el tope salarial suba de nuevo para la próxima temporada, así que vamos a disfrutar esta campaña", agregó el jugador. 

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