Tom Brady vs Mac Jones. Ese fue el duelo generacional que se vivió sobre el Gillete Stadium cuando Tampa Bay Buccaneers visitó a New England Patriots para cumplir con la Semana 4 de la National Football League (NFL).
El compromiso cargó con un morbo increíble debido al regreso de TB12 a Foxborough. Sin embargo, hay que ser honestos, la actuación del quarterback no estuvo a la altura de lo que se esperaba. Quizá la presión sobrepasó sus expectativas.
El QB se marchó sin pases de anotación, completó 22 pases de 43 posibles (poco más del 50% de efectividad) y lanzó 269 yardas. Aunque, a pesar de ello logró convertirse en el máximo líder de yardas aéreas en la historia de la NFL.
Por otro lado, Mac Jones figuró con 31 pases exitosos en 40 intentos, 275 yardas, una intercepción y dos touchdown, evidenciando un mejor rendimiento que el 7 veces ganador del Super Bowl. Aun así, niguno de ellos dos se robó el show del partido.
El quarterback sensación de la noche
No fue Brady, ni Jones. Drew Brees fue el mariscal de campo (retirado) que se robó el show en el Buccaneers vs Patriots, pues recordemos que cambió el ovoide por el micrófono de NBC para convertirse en analista de la NFL en el programa "Football Night in America".
