Previo a la temporada regular del fútbol mexicano, Tigres de México y otros cuatro equipos del mismo país, disputaron un torneo amistoso y, en la última jornada, André-Pierre Gignac se llevó un gran golpe en la cabeza.
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El delantero francés encendió las alarmas de la institución universitaria luego de caer ‘desplomado’ tras el impacto de un balón despejado por el defensor ecuatoriano, Félix Torres. Gignac, tras ser noqueado, recibió atención médica del club pero salió visiblemente afectado y mareado del terreno de juego.
Minutos después, se reveló el parte médico por parte del club y la información es tranquilizadora. Gignac presenta un traumatismo craneoencefálico. Cuando parecía que podría salir por su propio pie, Gignac primero sufrió nauseas y vomitó, después se tiró en el terreno de juego y requirió que el cuerpo médico entrara a auxiliar a la estrella del equipo Universitario.
Con respecto al suceso, el entrenador de Tigres, Diego Cocca mencionó que “se fue a hacer estudios por precaución” y que el doctor “tenía la expectativa de que no fuera nada mas que un susto”.
