Los Denver Nuggets les ganaron a los Miami Heat de todas las formas posibles en las Finales de la NBA: desempeños dominantes de sus dos grandes estrellas en Nikola Jokić y Jamal Murray; brillantes actuaciones de sus piezas secundarias para compensar actuaciones no deslumbrantes de sus figuras; con gran efectividad en triples; con baja efectividad en triples y, ahora, con su desempeño ofensivo menos eficiente de la postemporada.
Según John Schuhmann de NBA.com, los Nuggets anotaron 94 puntos en 96 posesiones, es decir, una tasa de 97,9 cada 100 posesiones. Esto implica la menor eficiencia ofensiva para cualquier equipo que haya ganado un partido esta postemporada (90 incluyendo Play-In). Los Nuggets tuvieron además su segunda peor presentación desde detrás de la línea de tres puntos en toda la temporada (102 juegos) con 18% de efectividad y la octava peor en tiros libres (57%).
Los Nuggets se convirtieron en el segundo equipo en ganar un título con un rating defensivo peor a 11 en la liga (Lakers 2001) desde que existe la estadística, pero mostraron su mejor versión en el momento más oportuno y anularon por completo a la ofensiva de los Heat.
Las razones para la victoria de Nuggets ante Heat
Los Nuggets destruyeron a los Heat en la pintura y los superaron por 13,6 puntos por juego en esa área durante las Finales. Esta es la mayor diferencia en la categoría para una serie en toda esta postemporada y en las últimas 23 Finales.
Por último, Jokić demostró ser el mejor jugador del mundo con otra actuación dominante que incluyó 28 puntos y 16 rebotes en 42 minutos de juego para darle a sus Denver Nuggets el primer título en su historia.