Las primeras semanas iban a ser claves para determinar cómo seguiría el futuro de Los Angeles Lakers y su plantilla. Por ahora, la temporada 2022-23 de la National Basketball Association (NBA) no les ha sido nada bonita. LeBron James y compañía sufren los partidos.

El equipo comenzó en sus primeros nueve partidos con un pésimo récord de dos victorias y siete derrotas. Hasta el momento, tal vez la única señal positiva ha sido el cambio que Darvin Ham, el entrenador, hizo con Russell Westbrook. El base ha sido el mejor jugador del campo para los Lakers desde que sale desde la banca.

Y es justamente Russ el que provocó en su intercambio, que Kentavious Caldwell-Pope tenga que irse de la franquicia angelina hacia Washington Wizards. Hoy, Pope juega en Denver Nuggets y ya tuvo la oportunidad de cruzarse dos veces ante su antiguo equipo con el que salió campeón.

Y fue ante esos Nuggets que LeBron obtuvo su primera victoria de la temporada. El escolta habló con ESPN y allí expresó su preocupación sobre sus rivales y sobre James. Se puede notar que todavía le importa y tiene cariño para la escuadra púrpura y oro.

A LeBron le falta la “chispa”

“Solo viendo los partidos, parece que no hay baloncesto allí. Solo se está jugando sin estrategia. A veces es difícil de ver. Así que de mi parte a él, solo reúne al equipo, y quiero ver esa chispa en él de nuevo. No creo que esté viendo esa chispa en Bron. Así que, con suerte, puede recuperarla”, declaró.