Wilmar Roldán goza de la mejor credibilidad en el arbitraje colombiano, sin embargo en los últimos encuentros que le ha pitado a Millonarios ha tenido tres errores que hubieran cambiado rotundamente el desarrollo de los partidos y, el pasado jueves contra Tolima, no tuvo la ayuda de los jueces VAR para anular el empate del Tolima.
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El primer grave error del árbitro antioqueño en contra del equipo embajador fue en el primer partido del cuadrangular, contra el América de Cali, cuando el jugador Mauricio Gómez le tiró una plancha que pudo partir la pierna del jugador Esteban Ruíz. Roldán, en medio de su prepotencia, le dijo al jugador azul que se levantara, que no era para tanto y sacó la amarilla.
Y el pasado jueves, el juez FIFA volvió a ser designado para el juego de Millonarios contra el Tolima y su actuación dejó mucho que desear. En el primer tiempo, dejó de señalar un penalti a favor de los locales por un empujón en el área de Julián Quiñones a Fernando Uribe, en una disputa por el balón. Además, en el segundo tiempo, el juez le hizo falta a un jugador pijao y pitó falta a su favor cuando nadie de Millonarios estaba cerca.
Finalmente, en el gol del empate, la jugada estuvo precedida de un fuera de lugar de Gustavo Adrián Ramírez tan evidente como el tamaño del estadio El Campin. Luego salió el tiro de esquina del gol y en la jugada hay un futbolista del Tolima que estaba en fuera de lugar e impidio que Esteban Ruíz fuera con libertad a cortar el balón que terminó en gol.
Muchos errores de Wilmar Roldán han sido parte de la condena de Millonarios a hoy solo tener cinco puntos en la tabla de posiciones del cuadrangular B y ya no depender de sí mismo para clasificar a la final de la Liga.
