Se juega el partidazo en el estadio Centenario de Montevideo entre la Selección Colombia y Uruguay, por la fecha 11 de las Eliminatorias Conmebol rumbo al Mundial 2026. Charrúas y colombianos se ven las caras en vísperas de asegurar el boleto a la Copa Mundo de México, Estados Unidos y Canadá. Hubo magia en la primera parte, gracias a Richard Ríos y Juan Fernando Quintero.
El técnico Néstor Lorenzo sorprendió con la nómina titular. Sacó a James Rodríguez y le dio ingresó a Juan Fernando Quintero, como la variante más importante del equipo. Por otra parte, el elegido para ocupar la baja de Jefferson Lerma fue Juan Camilo Portilla, quien hace tándem con Richard Ríos, quien se mandó una espectacular jugada por la banda izquierda, además del golazo de Juanfer de tiro libre.
Siendo mediocampista, su despliegue en la cancha es fenomenal, los cubre a todos y ocupa los espacios rápidamente para acelerar jugadas de gol. Así fue como apareció tirado a una banda en espacio reducido, para dejar totalmente perdido a Nahitan Nández. Sacó su magia de futsal, ‘sombrerito’ y a pasear. Un lujo que ya es viral en las redes sociales.
El globito de Richard Ríos 🇨🇴 a Nández, que minutos antes le había pegado en la cara. La mejor venganza.
Tras superar la marca, Richard Ríos mandó espectacular centro que cabeceó Jhon Jader Durán, siendo una de las jugadas más importantes del primer tiempo. Lastimosamente, la pelota se fue desviada. El volante de Palmeiras vuelve a demostrar su talento en la cancha y expone sus cualidades para poder dar el salto a Europa lo más pronto posible.
El golazo de Juan Fernando Quintero también es una obra de arte
Tras la jugada de Richard Ríos, cuando el partido lo dominaba Uruguay y acababa de tener una opción clara de gol que terminó salvando de gran manera Camilo Vargas, apareció el volante de Racing de Avellaneda para darle la tranquilidad al equipo dirigido por Néstor Lorenzo.
Simplemente Juan Fernando Quintero. Uruguay 🇺🇾0️⃣🆚1️⃣🇨🇴 Colombia
Juan Fernando Quintero sacó la magia que lo caracteriza y sorprendió a todos, incluso al portero Sergio Rochet. En lugar de meter un centro, remató al arco, colocó el balón a media altura y puso el esférico en un rincón imposible para el portero que se lanzó, pero no llegó. Calcó aquella pieza de museo ante Japón en el Mundial Rusia 2018.