Qué mala suerte ha tenido Marcos Rojo en su regreso a Estudiantes de La Plata. Regresó con el estado físico que puede tener cualquier jugado que no es titular en su equipo, como le pasaba en Manchester United.

Para colmo, a las pocas semanas, se desgarró y debía estar afuera de las canchas. Si no era suficiente eso para que no juegue, el coronavirus llegó y obligó a parar durante, por lo menos, seis meses.

Ahora, en las redes sociales, Rojo se viralizó por las fotos que subió el hermano en su cuenta de Instagram.

Ayer mostró al defensor usando la Diez de Juan Román Riquelme, la del 2001 con Boca, y ahora subió una foto aún más polémica.

Mostró al jugador fumando. Sí, un tema casi tabú dentro de los fubolistas y más con los cuidados que les exigen sus clubes.