Millonarios tuvo que vivir este domingo uno de los días más difíciles de los últimos años en el estadio Manuel Murillo Toro. Tras las agresiones por parte de un hincha del Deportes Tolima hacia Daniel Cataño, quien ingresó al terreno de juego para golpear al jugador antes de iniciar el compromiso, el plantel no pasó su mejor noche.

A la salida del escenario deportivo, varios aficionados del conjunto ‘pijao’ agredieron el bus en el que iba el equipo, lanzaron piedras y otros artefactos, una de ellas impactó una de las ventanas de la parte de atrás donde iba el defensa central Juan Pablo Vargas, quien se vio afectado con un golpe en su espalda.

El ambiente estuvo tenso dentro y fuera del estadio, los jugadores lo vivieron en carne propia, al igual que la afición visitante. Los ataques fueron constantes y el terror se apoderó de quienes iban a vivir el fútbol en paz.

Afortunadamente, el conjunto ‘embajador’ le dio un parte de tranquilidad a toda su hinchada y a quienes estuvieron pendientes de ellos. El club confirmó en redes sociales que ya arribaron en Bogotá: “¡Ya estamos en casa! Como siempre… ¡TODOS UNIDOS! ¡VAMOS MILLONARIOS!”