Millonarios salió con todo en búsqueda del gol que le diera el empate en la serie ante el Junior de Barranquilla, en la final de la Copa Colombia, anotación que llegó rápidamente.
Los ‘azules’ generaron muchas opciones de gol en los primeros minutos, generando que el portero Sebastián Viera se convirtiera en figura, con un par de atajadas muy importante, con los que evitó el tanto del local.
Al minuto 18 llegó la polémica, con un penal que cobró Wilmar Roldán, después de un aparente empujón de Daniel Rosero sobre Juan Pablo Vargas, la cual causó opiniones divididas.
Al que no le importó nada fue a Luis Carlos Ruiz, que con mucha potencia mandó la pelota al fondo de la red y ponía el 1-0 para los dirigidos por Alberto Gamero, con una celebración a todo grito por parte del delantero con pasadoen elJunior.