Este domingo, el fútbol profesional colombiano quedó manchado luego de que un hincha del Deportes Tolima se metiera a la cancha del estadio Manuel Murillo Toro y le pegara al jugador de Millonarios, Daniel Cataño, segundos antes de que el árbitro Wilmar Roldán señalara el inicio del partido.

Luego de la agresión y una larga deliberación, el cuerpo técnico y jugadores del equipo embajador decidieron salir de la cancha trasacusar falta de garantías a su seguridad para el libre desarrollo del encuentro. Sin embargo, esta acción fue repudidada por el presidente del Deportes Tolima, CésarCamargo, quien dijo que todo hacía parte de un “boicot” por parte de Millonarios.

“Hay dos actos que son absolutamente reprochables. No puedo hablar mucho más de lo que pasó con el hincha, que se sale de nuestro control, pero hay otro hecho impresentable que sí está bajo el control de nuestros equipos y es que un equipo se retire de la cancha”, dijo el mandatario.

No obstante, en el Tolima sí hubo declaraciones bajo el marco del sentido común y el capitán del equipo, Julián Quiñones, le dio la derecha a Millonarios en su decisión de no jugar. “Son cosas que no pueden pasar en el fútbol y se debe marcar un precedente y para mi estaría bien que no se jugara el partido. Hoy le tocó a Cataño, mañana le puede pasar a cualquiera de nosotros”, dijo el futbolista.