Como si fuese el Modo Carrera del FIFA o la Liga Máster del ya extinto Pro Evolution Soccer, Flamengo ha demostrado el poderío económico de los clubes brasileños en el mercado de pases (tan distante del resto de sus pases de Sudamérica) con contrataciones de rasgos europeos.
Inscribió a Andreas Pereira procedente del Manchester United, Kenedy del Chelsea y, el fichaje estrella nada menos que de David Luiz. Por eso, en la previa, las apuestas catalogan ya casi de hazaña histórica lo de Barcelona de Guayaquil por las semifinales de la Conmebol Libertadores; hoy en el Maracaná de Río de Janeiro se disputa la ida.
Sin embargo, parece que no todas son buenas noticias y que hay una cara detrás de la moneda en cuanto a la contratación de estrellas que son imposibles para sus competidores. Este miércoles, en la previa del encuentro contra el equipo de Fabián Bustos, alertan de un conflicto desde Brasil.
El periodista Gilmar Ferreira ha publicado en Extra Globo sobre los daños colaterales de los contactos entre la dirigencia de Flamengo y lo que podría ser su próximo refuerzo de jerarquía: Dani Alves. El jugador más ganador de la historia del fútbol rescindió su contrato con São Paulo hace apenas unos días y puede ser inscripto por un club brasileño hasta el viernes.
Se habla que hasta habrían llegado a un acuerdo económico y que todo podría sellarse en las próximas jornadas. Según el periodista, el ex Barcelona habría pedido la titularidad y tener una cláusula de salida por una oferta del extranjera. Principalmente, en la primera exigencia es donde habría roces.
¿Por qué? Es que Mauricio Isla, el lateral derecho de la Selección Chilena, es el titular y se ha ganado el puesto a base de buenas actuaciones desde que está en mediados del año pasado. Así mismo, sus últimos meses no han sido nada buenos y hasta la prensa local lo ha calificado como "el peor jugador de Flamengo".
Según informa Ferreira, el chileno "se siente perseguido, infravalorado y presionado, aún más después de la rescisión de Dani Alves en São Paulo". Un problema de vestuario que deberá manejar tanto la directiva como Renato Gaúcho, el entrenador. Por lo pronto, los de Flamengo hoy tienen semifinales nada menos que con Barcelona de Guayaquil, que buscará dar el golpe en el Maracaná.
