El pasado fin de semana, Arizona Cardinals confirmó uno de los bombazos de la temporada baja en National Football League (NFL), con el despido del receptor DeAndre Hopkins.
A partir del anuncio, de inmediato comenzaron a surgir rumores sobre los posibles equipos que podrían recibirlo, sumado esto a su intención de firmar un contrato por casi $20 millones de dólares al año.
En medio de este panorama, apareció en el horizonte Cleveland Browns, donde juega un viejo conocido de Hopkins, como Deshaun Watson, con el que jugó en la Universidad de Clemson, y en Houston Texans, quien no ocultó su deseo de tenerlo como compañero de equipo para NFL 2023.
Watson le abre las puertas de Browns a Hopkins
“D-Hop y yo hablamos naturalmente. Hablamos desde los días de Houston, y cada que él estaba en Arizona, siempre hablábamos. Siempre ha sido un hermano para mí, desde que salí de la secundaria. Nuestra relación siempre ha sido genial”, partió señalando el quarterback.
En ese sentido, Watson enfatizó sobre Hopkins que “hay muchas cosas dando vueltas sobre su posible llegada a Cleveland. Para mí, mi respuesta es, por supuesto que nos encantaría tenerlo. Él lo sabe, pero esta fuera de mi rango de cosas de tratar de coordinar”, poniendo presión al gerente general de Browns, Andrew Berry.