El coronavirus y su irreflenable avance vuelven a poner al gobierno de Vizcarra en el centro de la escena. Además, el caso de Richard Swing aún no tiene una explicación convincente y la popularidad del Presidente comienza a disminuirse.
Por ello, hay algunos que aprovechan para hacer política. La oposición, hoy con poca solidez y unidad, se manifiesta y saca crédito de cada tropiezo del Primer Mandatario.
Un ejemplo de esto es Mauricio Mulder. El excongresista del partido aprista aún se expresa dolido por la disolución de la que el fue parte por negarle dos veces la confianza al gabinete de ministros.
Él, ahora sin empleo conocido, dijo presente para criticar al congreso por el caso Swing. Por supuesto, aprovechó y también disparó contra Vizcarra, hoy su enemigo político.
"Causa hilaridad que editorialistas de periódicos y conductores de televisión se sorprendan por escasísimo nivel intelectual, constitucional y legal del congreso. Estos mismos medios de comunicación hicieron de los partidos políticos el punto focal de todos sus ataques", expresó en un video.
Además, le pegó a la llamada reforma política y llamó golpe de estado a la pasada disolución del congreso. Hay que mencionar, de todas formas, que si su partido no tiene representación es por que no llegó a la valla electoral. Nada más.