El América es uno de los conjuntos más destacados de la Liga MX. Sus refuerzos, como su historia y su grandeza lo marcan, son seleccionados con cuidado y llegan con grandes pergaminos. Sin embargo, no todos soportan la presión que transmite el cuadro de Coapa.
En Bolavip decidimos elaborar un listado con los diez peores delanteros de la historia de las Águilas.
Hernán Rodrigo López: El uruguayo llegó como un gran proyecto luego de salir campeón con Vélez Sárfield. Contaba con una amplia experiencia en el exterior y en su primera campaña con las Águilas no defraudó: convirtió siete goles en 16 encuentros. Sin embargo, luego se quedó corto y debió marcharse.
Raúl Amarilla: Los capitalinos habían cumplido una excelente campaña y querían agrandar la gloria en 1989. Para ello compraron al paraguayo, que hasta había jugado en el Barcelona. Lamentablemente, se volvió a su tierra antes de que finalice la temporada.
Moctezuma Serrato: Surgido en las Fuerzas Básicas del América, campeón con el club y con Pumas. A pesar de todo, no fue un partícipe importante en las consagraciones.
Fabio Moreno: Llegó luego de anotar 51 tantos en tres años en el América de Cali. No pudo hacerlo en América de México, ya que solo hizo seis goles en 19 partidos.
Andrés Ríos: Goleador en el Deportivo Cuenca de Ecuador, pero no lo pudo repetir en México. Solo dos anotaciones en 12 juegos.
Santiago Fernández: Era considerado una joya durante sus primeros pasos, pero su mote quedó en "eterna promesa". Jamás logró afianzarse en el primer equipo.
Narciso Mina: Llegó con un notable promedio de gol desde el Barcelona de Guayaquil. En América no pudo mostrar ni por asomo ese nivel: solo marcó cinco tantos en 27 encuentros.
Nelson Cuevas: Su caso fue muy particular. Era un suplente que respondía como cambio, pero luego de unas fallidas negociaciones por irse al PSV comenzó a demostrar muy poco interés en el terreno de juego.
Robert de Pinho: Llegó luego de un buen paso por Atlas y con un amplio paso por el exterior, pero sus cuatro goles en cinco cotejos demostraron que la playera de los Azulcremas le pesó.
Jérémy Ménez: El francés fue un elemento destacado del futbol europeo en sus mejores épocas, pero no fue ni la sombra en el América. La irregularidad y las lesiones fueron moneda corriente y volvió a su país.