Hay que valorar de Nicolás Burdisso que haya dado la cara a una semana de la eliminación de Boca en semifinales de Copa Libertadores ante River, cuando no lo hicieron ni el entrenador ni los futbolistas.

Hay que recriminarle, sin embargo, la imprecisión de sus respuestas en la conferencia de prensa, en la que no hizo más que dejar sembradas hasta diciembre las principales dudas que existen hoy en el Xeneize.

Lo hizo respecto al futuro del entrenador y fundamentalmente respecto a la continuidad de un Carlos Tevez cuyo contrato finaliza en junio de 2020, pero que se cree que incluso podría decir adiós a fin de año.

"La situación de Carlos me la preguntaron en marzo y en julio, dije que no era momento de responder. Ahora digo lo mismo, hay que pensar en los partidos que nos quedan y después veremos", expresó el mánager de Boca.

Y por las dudas, Burdisso aclaró: "No tomo las decisiones solo. Las tomo con los dirigentes, con el entrenador y muchas veces con los propios futbolistas, buscando lo mejor para Boca. El club está por encima de cualquier apellido".