Apenas jugó 45 minutos. No obstante, fue tiempo suficiente para que Lionel Messi haga dos goles, uno de ellos dejando en el camino a tres rivales.
Para el segundo tiempo, el Diez ya no estaba en cancha y miró el final del partido entre Argentina y Nicaragua desde el banco de suplentes.
Sin embargo, cuando terminó el partido, Messi volvió a tomar protagonismo en la transmisión oficial.
¿Por qué? Es que al capitán de la Albiceleste lo volvieron locos los jugadores centroamericanos con tal de una foto.
¡Esto es lo que genera Messi!