Luego de lo que fue la definición por penales en la final de la Eurocopa el domingo que decretó a Italia como campeón, se produjo una ola racista en las calles inglesas y en las redes sociales hacia Marcus Rashford, Bukayo Saka y Jadon Sancho , que fallaron sus ejecuciones. Las repercursiones continúan hasta el día de hoy y hasta las autoridades nacionales levantaron la voz en contra de la discriminación.

Este miércoles, en una sesión en la Cámara de los Comunes, Boris Johnson , el Primer Ministro británico, no evitó el tema que está protagonizando todos los debates actualmente en el país europeo. El mandatario anunció que no se va a quedar de brazos cruzados ante los insultos que recibieron los futbolistas y anunció medidas para contrarrestar próximos ataques.

Johnson informó que se reunió el martes con representantes de las redes sociales Twitter, Facebook, Instagram, TikTok y Snapchat para trabajar junto a ellas en la erradicación de los ataques racistas. " Vamos a legislar para solucionar este problema con una nueva ley de agresión online y, como no acaben con el odio y el racismo en sus plataformas, se enfrentarán a multas equivalentes al 10% de sus ingresos globales. Y todos sabemos que tienen la tecnología para hacerlo ", avisó el Primer Ministro.

En la misma línea, y contra los usuarios que publicaron los insultos discriminatorios, Johnson anunció que están tomando medidas para que se cambie el régimen de prohibición de acceso a los estadios. De esta forma, si alguien es culpable de emitir comentarios racistas en las redes sociales hacia los futbolistas no podrán asistir a los partidos.