Como un barco sin brújula. Esa fue la actuación de San Lorenzo ante Newell's.  Sin rumbo, erróneo y lento, los dirigidos por Ruben Darío Insua cayeron por 3-0 en una tarde negra en el Pedro Bidegain.

El Ciclón no la tuvo fácil. En unos primeros minutos donde nada pasaba, el equipo fue fiel al estilo que viene teniendo hace más de un año: esperar en campo propio y aprovechar las contras.

Fue así que la primera jugada de peligro en el partido llegó.  Tras un córner bien defendido por el Ciclón, Jalil Elias cambió de lado para un Ivan Leguizamon que ganó en velocidad, tiró el centro pero que ni Adam Bareiro ni Gastón Ramírez pudieron conectar.

Pero eso no iba a ser todo. Newell's dijo presente en el partido y a través de una pelota aérea apareció Ferreira para abrir el marcador luego de una mala defensa del local.

A falta de buen fútbol en el Nuevo Gasómetro, los bancos de suplentes se convirtieron en protagonistas. Ruben Darío Insua protagonizó un caliente momento con un ayudante de campo de Gabriel Heinze que derivó en el DT de San Lorenzo viendo la roja en 40 minutos del primer tiempo.

Pese a no tener claridad, el conjunto azulgrana siguió intentando encontrar el empate en contras comandadas por Ramírez y finalizadas con centros de Agustín Giay que luego los delanteros no pudieron aprovechar.  Sin nada pasando en el partido, se bajó el telón de la primera parte.

San Lorenzo estaba desconocido. A pesar de los ingresos de Gonzalo Maroni y Francisco Perruzzi para buscar más profundidad, el equipo no reaccionaba y la Lepra aprovechó los descuidos.

En una contra donde el Ciclón quedó mal parado, los comandados por Heinze fueron participes de una jugada de pizarra que culminó con Ferreira apareciendo nuevamente para que, del borde del área,  saque un derechazo y marque el 2-0 para su equipo. 

San Lorenzo estaba perdido en el verde césped. Sin Insua en el banco de suplentes, el equipo perdió el horizonte y pagó caro los errores individuales. 

Malcom Braida, de una baja tarde, despejó mal y dejó la pelota servida en los pies de Sordo que aprovechó su velocidad para quedar mano a mano con Augusto Batalla y sellar el 3-0 para Newell's.

Pero el golpe no iba a terminar ahí. Con un Ciclón caído animicamente, Gonzalo Lujan vio la segunda amarilla tras una falta cometida en mitad de cancha y terminó viendo los 20 minutos finales desde el vestuario. 

 San Lorenzo tuvo uno de los peores partidos de la era Insua. Con un entrenador que mostró una cara nunca antes vista, y un equipo que dejó mucho por desear, el Ciclón cayó por goleada ante Newell's y el futuro comienza a ser preocupante para Boedo.