La hinchada Selección Colombia ha sido altamente criticada a lo largo del tiempo por su forma de ver los partidos desde la tribuna. El “sí se puede, sí se puede” es una de las frases más usadas en los estadios del país, en especial en Barranquilla, y que, además, es uno de los cánticos más desacreditado de los últimos tiempos.
Lo que muy pocos saben es que existe una barra popular que alienta a la Selección y la acompaña en todos los partidos de todas las categorías. En Bogotá se hicieron sentir y en el debate sobre cuál debería ser la casa de la ‘tricolor’, aparecieron ellos explicando de dónde vienen, qué hacen y quiénes pueden ser parte de ellos.
La Fiebre Amarilla es la única barra popular que hasta ahora acompaña al combinado nacional. ¿De dónde nacieron y cómo se fundó? “Es una idea que surge de un grupo de hinchas de diferentes clubes del fútbol colombiano, que decidieron unirse en torno a la pasión que despierta el fútbol”, explicaron en sus redes sociales.
Para algunos que piensan que son otro tipo de barra brava llena de conflictos internos, son todo lo contrario: “con el deseo de aportarle a la sociedad positivamente y sobre todo mostrar que aunque existan diferentes colores, somos capaces de respetar y tolerar los gustos y diferencias que tenemos. Y así poder acompañar a la Selección en todas las canchas sin que haya conflicto…”
Su principal objetivo es el de hacer sentir visitante al rival, que sienta respeto por venir a jugar a Colombia y que la ‘tricolor’ se sienta respaldada los 90 minutos: “tenemos como objetivo acompañar a la Selección en todas las competencias, armar la fiesta y el carnaval, para que al rival en un futuro en vez de sentirse a gusto con el ambiente del hincha colombiano, sienta el respeto y la presión de jugar contra Colombia.”
Para quienes quieren hacer parte de La Fiebre Amarilla, ellos han abierto difernetes convocatorias para acercar a más hinchas que tengan el mismo objetivo: “cualquiera puede ser parte de esta iniciativa, no importa edad, sexo, condición socio-económica, raza o religión, mientras su único objetivo sea alentar a la “tricolor” y vivir un fútbol con pasión y respeto”.