Una ofensiva deficiente en el FPC puede convertirse en la peor pesadilla para cualquier equipo. La falta de goles, la ineficacia en la definición y la poca capacidad para presionar al rival son lastres que condenan al fracaso incluso a los equipos más grandes.
Imaginemos un equipo plagado de delanteros que fallan goles cantados, mediocampistas que no generan ocasiones claras y una defensa que se desmorona ante la mínima presión. Este equipo, sin importar su nombre o historia, se verá abocado a una temporada tortuosa.
Un equipo grande con una ofensiva pobre se convierte en presa fácil para los equipos “chicos”, que, con orden y sacrificio, aprovechan las oportunidades que el rival les regala. La humillación de perder ante un rival inferior es una herida profunda.
El equipo grande sin goles
De acuerdo a las estadísticas, el equipo grande del FPC con 450 minutos sin anotar es Atlético Nacional. El club verdolaga, anotó por ultima vez el 16 de febrero del 2024 en lo que fue la derrota contra Deportivo Cali 2-3.
Para alcanzar los cuadrangulares, Nacional necesita escalar posiciones en la tabla, lo que implica ganar la mayoría de sus partidos restantes y esperar resultados favorables de otros equipos. La tarea se vuelve aún más compleja considerando la irregularidad del equipo en el presente campeonato.
La dirigencia de los equipos colombianos debe entender que la ofensiva es el motor del éxito. No hay excusas para no invertir en jugadores de calidad que lleven al equipo a la victoria. La afición lo exige, el prestigio del club lo necesita y la gloria está al final del camino.