Michael Jordan siempre quedará en un lugar inalcanzable, por ello, cada vez que llega un jugador a Chicago Bulls con potencial de figura, los zapato que tiene que llenar en la National Basketball Association (NBA) se vuelven gigantes.
Sin embargo, parece que Zach LaVine va por buen camino, si bien, hablar del jugador como ‘nuevo MJ’ es una locura total anticipada, poco a poco comienza a darle esperanzas a la organización de Illinois que no experimenta alegrías desde la década de los 90.
En el debut de la temporada 2021-2022 del mejor baloncesto del mundo, experiencias del pasado se revivieron sobre el tabloncillo del Little Caesars Arena cuando los Bulls visitaron a Detroit Pistons, uno de los duelos con mayor fricción y adrenalina en la época grande de Jordan y compañía.
Zach LaVine brilló con luz propia
Para esta campaña, Chicago se armó con una buena plantilla que emociona a los aficionados. Zach LaVine se encargó de aumentar esa alegría tras destrozar a los Pistons con 34 unidades, siete rebotes y cuatro asistencias en 35 minutos de acción para que los suyos triunfaran, 94-88.
Sin duda alguna, la temporada es muy jóven, apenas inicia y aún falta mucha tela por cortar. Pero los fanáticos de los Bulls ven en Zach LaVine una muesca de liderazgo, talento y actitud que no se evidenciaba desde Jordan, el GOAT.