Ante la normativa de no hacer ingresar a un establecimiento a un gran puñado de personas en un mismo momento, un sinfín de personas se vieron obligadas a cambiar sus mecánicas de trabajo fruto de la expansión del coronavirus.
Sin lograr desprenderse de la situación al congregar en las misas a decenas de personas todos los fines de semanas, los curas tambiénse vieron severamente afectados por la pandemia mundial que tiene en vilo a la Tierra en estos momentos.
Adaptándose a un presente más que caótico, usuarios poco habituales comenzaron lentamente a trasladar su foco de atención a las redes sociales.
Mediante videos en directo a través de distintas plataformas, los canales de comunicación pasaron a tener un rol de vital importancia para la continuidad de distintas actividades en las pantallas de los dispositivos móviles.
En las últimas horas, por ejemplo, un video se hizo viral en la plataforma de Twitter por un motivo más que particular. ¿El protagonista? Un cura de Italia.
El sacerdote, al no poder celebrar una misa acompañado, decidió transmitir la misma a través de su teléfono. Pese a que las intenciones eran buenas, el profesional no tuvo en cuenta un pequeño detalle: ¡los filtros estaban encendidos!
Al comenzar con su discurso, la cara del cura comenzó a ser adornada por distintos elementos como gorros, lentes e incluso pesas.