Bastián Roco se escucha con voz de tristeza. Es lógico, el joven de 19 años vive un infierno en Huachipato. La situación es crítica para el defensa en el líder del fútbol chileno. De pasar a ir en la citación con los acereros hoy fue borrado del primer equipo. En entrevista exclusiva con Bolavip, el hijo de Sebastián Roco entrega los detalles de lo que pasó con su situación en las últimas horas.
“Pasa que es raro porque hace dos días estaba en Rancagua para el partido contra O’Higgins y hoy estoy fuera del equipo. Entonces, me parece raro. Medicen una cosa, después me dicen otra. Le he dicho a hartas personas que me quiero quedar en Huachipato, pero no sé que pasa”, sentenció.
Además, el joven dio a conocer que hoy en el Estadio Huachipato tuvo una reunión con Gustavo Álvarez y ahí le dijeron la dura y pura verdad para él en 2023, en una situación que no deja de causar extrañeza con uno de los activos del club acerero.
“Hoy me levanté, tenía un mensaje que me debía reunir con el profe (Gustavo Álvarez) en su oficina y solo me dijo que no podía contar más conmigo, que eran órdenes de más arriba y que netamente él no podía hacer nada, que solo tenía que acatar esas órdenes”, manifestó.
Sobre su marginación de Huachipato, Roco no quiso cargar con Álvarez y apeló a que “al final, lo entiendo, porque no es culpa de él no puede hacer nada. Solo está para entrenar y no se preocupa de hacer los contratos. Lo entiendo, no tiene la culpa y élme transmitió ese mensaje que no iba a contar más conmigo, que eran órdenes de más arriba“.
Sin duda, el 2023 no ha sido de lo mejor para Bastián, quien está enfocado en ver qué pasará con su situación. Por lo pronto, el defensa adelantó que “si me toca entrenar en cancha de tierra o en el gimnasio voy a seguir haciéndolo. Tengo contrato hasta diciembre de este año y lo voy a cumplir. Si me tengo que presentar media hora después, como lo vengo haciendo, lo cumpliré. Si tengo que estar corriendo por fuera o con un compañero, seguiré. Tengo la disposición de querer entrenar y aprender”.
El momento más conmovedor y con un Roco con la voz entrecortada fue que: “Me ha tocado cargar con una mochila que no tenía que haber cargado tanto tiempo. Ha sido mucho, quedar fuera del Sudamericano, quedar fuera del equipo, te pega fuerte porque uno no espera comenzar el año así. Uno quiere sumar y jugar. Al final, uno sabe que no va a ser así“.