Felipe Flores dejó de ser jugador de Barnechea a fines de 2021 y fue anunciado esta semana como refuerzo de Magallanes para encarar la temporada 2022 en donde el conjunto carabelero buscará el ansiado y esperado ascenso a la Primera División del fútbol chileno.
El ahora ariete de Magallanes conversó con Las Últimas Noticias y contó cómo ha sido su integro al equipo capitalino: “El jueves los conocí y este viernes tuve mi primer entrenamiento. Es un gran plantel, de muy buen pie. Está Nicolás Crovetto, quien fue compañero mío en Colo Colo. Me recibieron súper bien y me motiva que hay un buen proyecto, es un club serio”.
Bajo esa misma línea, Flores asegura que la llegada a Magallanes lo ubica en otro momento de su vida, diciendo que “Estoy más maduro, con familia, hijo. El panorama es distinto. Todo lo que hago hoy en día mis logros, son para mi familia. Estoy contento en el ámbito familiar y futbolístico. Estoy disfrutando mucho esta etapa. Y también tengo ganas de seguir haciendo goles”.
“Mientras tenga esa ambición y ganas de levantarme a entrenar, voy a seguir dándole. Mi hijo está creciendo, ojalá que más adelante pueda ir conmigo a la cancha. Quiero aprovechar esas cosas, que disfrute yendo conmigo a entrenar y todo eso”, complementó.
Consultado sobre si el retiro está dentro de sus planes, Flores aseguró que “No, no todavía. Tengo cuerda para rato. Firmé un año con Magallanes y mi objetivo es ascender, nos reforzamos para eso. Una vez terminado el año veré qué hago. Pero no pienso en el retiro, me siento bien físicamente, con muchas ganas”.
Uno de los motivos por el que quiere aplazar el retiro, es para que su hijo pueda verlo en cancha: “Está chiquitito todavía, no cacha mucho. Por eso no pienso en el retiro. Me encantaría, no sé, en dos años más cuando Facundo ya tenga conciencia y pueda acompañarme a los partidos. Quiero inculcarle todo eso. Que, antes de retirarme, sepa que su papá es futbolista”, remató.