América de Cali no solo se quedó sin título una temporada más, en 2024 la Mecha perdió mucho más que eso.
El objetivo, como para todos los demás equipos, era quedarse con al menos uno de los títulos que se disputan cada año en el país. Durante la mayor parte de la temporada el cuadro vallecaucano logró dar buenas presentaciones y llegó a etapas avanzadas en las competencias.
En la Liga BetPlay el equipo de Jorge ‘Polilla’ da Silva se desinfló y no logró pasar de los cuadrangulares. De su grupo cedió el cupo al Deportes Tolima, semifinalista del torneo.
En cambio, en la Copa BetPlay los diablos rojos pudieron hacerse campo en la final, en la que enfrentaron a Atlético Nacional.
La despedida del ídolo Adrián Ramos
Antes de jugarse la final de esa competencia Adrián Ramos, capitán e ídolo del América de Cali confirmó su salida del equipo y el retiro como jugador profesional.
Aunque era algo que los hinchas veían venir, la noticia conmovió a más de uno, sobre todo en un momento como ese, en el que tenía una final a la vuelta de la esquina.
La noticia le arrugó el corazón a la hincha, pero se convirtió en un motivo más para querer quedarse con la copa y darle una despedida por lo más alto al capitán del equipo.
“Hoy me despido siendo un capitán y líder que siempre quiso lo mejor para América y su gente, Dios los bendiga. Siempre en las buenas y en las malas; y recuerden, americano por siempre”, dijo el jugador en su mensaje de despedida.
La copa se le fue de las manos al América de Cali
El partido vuelta se jugó en la casa de la Mecha, otra razón que fortalecía ese deseo de quedarse con el título. Al Pascual Guerrero se llegó con un marcador de 3-1, Atlético Nacional había aprovechado su ventaja en casa.
Sin embargo, el ambiente festivo, la despedida de Adrián Ramos y el hambre de gloria de los diablos rojos pintaban el escenario perfecto para remontar el marcador y, al menos, definir en penaltis.
Pero las cosas no ocurrieron como el equipo y la afición esperaban. América de Cali no pudo anotar ni un solo gol para disminuir la ventaja que había alcanzado Atlético Nacional en Medellín. El marcador del segundo encuentro quedó cero a cero.
La copa se le escapó de las manos a la Mecha, pero eso no fue lo peor. El título se lo quedó su más grande rival a nivel nacional.
Además, la despedida de Adrián Ramos se vio empañada, no solo por perder la copa, sino por las graves alteraciones de orden público en el estadio. La hinchada se descontroló y lo que debía ser una fiesta pudo terminar en tragedia. Las autoridades reportaron un alto número de heridos y varios daños importantes a la infraestructura del Pascual Guerrero.