Para quienes seguimos de cerca la carrera de Paolo Guerrero en los últimos tiempos, se nos cierra un poco el pecho cuando recordamos lo duro que fueron estos meses del 2022. Si nos preguntamos por qué le fue tan mal, es necesario regresar en el tiempo, al principio de todo, cuando todavía tenía una leve esperanza de mantenerse vigente.
Corría el mes de enero y Paolo Guerrero estaba sin equipo, luego de rescindir contrato con el Inter de Porto Alegre, ahí se hablaba mucho de su posible llegada a Alianza Lima. Los medios de comunicación tuvieron la osadía de asegurar que el jugador estaría entrenando en Matute a mediados de marzo. Este hecho nunca pasó, por eso le ponemos esa calificación.
Resulta que El Depredador aún tenía en mente seguir compitiendo a nivel internacional, se sentía con fuerzas de estar en la élite sudamericana. Avaí FC le dio la derecha, contratándolo por el resto de la temporada 2022, con un pormenor importante, el cual estaba basado en el rendimiento. No estaba ganando el mejor dinero, tampoco estaba siendo considerado como un crack, era un jugador del plantel más.
Lastimosamente, nunca cerró un buen partido. Tuvo chispazos de talento en la Serie A, más conocida como el Brasileirao, esto terminó siendo un punto a favor para quienes creían que podía llegar a la Selección Peruana para la recta final de las Eliminatorias, y el Repechaje Internacional frente a Australia. No pasó ni uno, ni lo otro. Según se pudo conocer, hasta hoy hay malestar del atacante con Ricardo Gareca por ese hecho.
Su año 2022 con La Blanquirroja, de donde supo ser capitán por largos años, se pasó así de rápido. Entre el olvido y mirarlo de reojo, porque había otro ídolo vigente, como Gianluca Lapadula. Solo algunos periodistas, afines al jugador, pedían el regreso del ex Corinthians y Flamengo, pero más allá de eso, no existían motivos para darle la derecha a esa eventualidad. Así podría terminar el resumen general.
Pero para los intereses de Paolo Guerrero, no acaba ahí. Avaí terminó descendiendo a la segunda división luego de 38 jornadas, y solo haber cosechado 35 unidades. Nuestro ídolo no marcó ni un solo gol. Siendo despedido por bajo rendimiento, para ser menos duro, no se le renovó la confianza y su contrato expiró. Ahora, al cierre del 2022, se puede decir que aún busca equipo en el extranjero.
Sin embargo, todos los caminos conducen a que volverá al Perú para jugar la Liga 1, o en defecto, ver alguna opción exótica. El punto fijo como Argentina, donde fue tentado siempre, hoy le cierra las puertas, por su reciente recuerdo. Aquel que está lleno de momentos lamentables, donde se le vio lesionado, o en mala forma competitiva. Veremos cómo será el 2023 para nuestro gran capitán. ¿Y tú cómo calificas su año 2022? Nosotros, nos guardamos los adjetivos calificativos.