Para nadie fue indiferente el castigo que la National Basketball Association (NBA) le impuso a Robert Sarver, propietario de Phoenix Suns, por actos de misoginia, sexismo y racismo contra trabajadores, incluso para la máxima figura del equipo, Chris Paul.
A pesar de que la investigación realizada por la competición comprobó empíricamente las actitudes del empresario, que son reiterativas en el tiempo, se decidió sólo multarlo con el pago de $10 millones de dólares, además de suspenderlo de sus funciones por un año.
Ante esta sanción hacia Sarver, un grupo de empleados de los Suns indicaron a la cadena ESPN que si bien la NBA demostró la culpabilidad del dueño, "nos falló cuando tuvieron la oportunidad de respaldar sus valores como la diversidad, la equidad o la inclusión".
CP3 se une a trabajadores de Suns contra sanción de NBA a Robert Sarver
Por su parte, el veterano base de 37 años, que llegó al equipo en 2020 y que suma un título de Conferencia Oeste, no se quedó callado y a través de su cuenta en Twitter expresó su sentir por esta medida, rechazando de plano el castigo impuesto.
"Como muchos otros, revisé el informe. Estoy horrorizado y decepcionado por lo que leí. Esta conducta, especialmente hacia las mujeres, es inaceptable y nunca debe repetirse", escribió Chris Paul, agregando que "las sanciones no lograron abordar verdaderamente lo que todos podemos estar de acuerdo en que fue un comportamiento atroz. Mi corazón está con todas las personas que se vieron afectadas".
