No busquen más porque hasta la Semana 14 de la NFL ya vivimos el juego más loco de la temporada con 89 puntos, dos quarterbacks lesionados y un final de película. Baltimore Ravens venció 47 a 42 a Cleveland Browns en un duelo que tuvo de todo y para todos.

El juego se empezó apretar en el FirstEnergy Stadium y durante el último cuarto no se podía ni pestañear porque algo pasaba. De un momento a otro, Lamar Jackson ya no estaba en el juego: ¿qué pasó? Se fue al vestidor porque tenía calambres. Entonces, los Browns aprovecharon.

Baker Mayfield anotó un touchdown con un acarreo de cinco yardas y los Browns se fueron arriba en el marcador. Trace McSorley al campo en reemplazo de Jackson y en un resbalón se dobló la rodilla. Afuera. Lamar volvió corriendo del vestidor porque los Ravens no tenían más quarterbacks.

Como salido de una película, Jackson regresó del vestidor y en la primera jugada lanzó un pase de anotación de 44 yardas. Arriba los Ravens, pero en cuatro jugadas volvieron a remontar el marcador los Browns con un touchdown de 22 yardas que Mayfield le lanzó a Kareem Hunt. Cleveland lo iba a ganar.

 

El final de Ravens vs. Browns: Monday Nigth Football Semana 14 NFL

Lamar Jackson no quería perder el juego contra los Browns y en una serie de cinco jugadas le dejó el ovoide a Justin Tucker, quien metió un gol de campo de 55 yardas. Ravens arriba 47 a 42 con dos segundos en el reloj. A Cleveland no le quedó otra que intentar un bad beat que le salió de la peor forma posible porque terminaron perdiendo el juego más loco del 2020 en la NFL hasta la Semana 14.