Temprano ganó Bayern Múnich al Bochum, y Unión Berlin estaba obligado a ganar, pero perdía en su salida a Leipzig, el cuadro local ganaba con un gol de Henrich, sin embargo, apareció Janik Haberer para romper el hielo.

Un golazo del borde del área, salvando las distancias, al estilo de Zinedine Zidane contra al Bayer Leverkusen en aquella recordada final de Champions League de 2002, donde el francés clavó una volea sensacional.

Ahora le tocó al Leverkusen anotar ese gol, Janik Haberer para igualar un partido que parecía imposible, luego su compañero Knoche dio vuelta las cifras y Unión Berlin se acomoda en el segundo lugar a solo un punto de Bayern Múnich.

Las posiciones en la Bundesliga