Nicolás Sánchez arribó a Rayados en enero de 2017 y de a poco se fue ganando un lugar en el corazón de todos los aficionados de la institución. Una vez se hizo con la titularidad, nunca más la soltó y fue pieza fundamental para varios títulos del club en los últimos años.
Su estelar actuación frente a Tigres UANL, hace poco más de un año y en la Final de la Concacaf Champions League, provocó que sea tomado como un verdadero referente del equipo. En una entrevista exclusiva con Bolavip, el defensor argentino habló de su adaptación al club, el título ante los Felinos, la consagración en el estadio Azteca, el encuentro ante Liverpool y mucho más.
¿Encontraste tu lugar en el mundo en Rayados?
"No sé si lugar en el mundo porque sería injusto conmigo mismo en otros lados donde me sentí bien también. Pero no puedo negar que esto que estoy viviendo acá no lo viví en ningún lado. Más allá que uno pueda tener buenos rendimientos, a veces no tanto, la relación que tengo con la gente del club no me había pasado nunca en ningún club. Rebasó totalmente todas mis expectativas y es algo que disfruto muchísimo".
¿Cómo descubriste a su afición?
"Así escuchaba y así dicen, que es la mejor (afición) del país. No fue fácil (la adaptación) y más para un extranjero que no era conocido, a mí no me conocía nadie. No arranqué bien, en mi primer partido hice un gol en contra. En el primer torneo tuve altibajos, acá a mí me mataban. Para mí no estaba tan mal como decían. Todo empezó a repuntar en el segundo semestre, ya sentí mejor la adaptación y con continuidad empecé a levantar y a hacer que me miren de otra manera. Hice goles importantes, le hice muchos al Clásico rival, a Tigres. Todo eso fue sumando en la confianza mía y en la de la gente, y se creó esta relación que tenemos".
¿Hubo un momento puntual en donde pasaste a ser querido por la afición?
"La gente expresaba el cariño por mí en todos los partidos y en la calle, pero hubo un quiebre terrible que fue cuando ganamos la Concachampions. Nosotros jugamos dos grandes partidos tanto en cancha de Tigres como en la nuestra y yo hice los dos goles de la Final. Ahí lo noté (el cariño). La gente tuvo una expresión muy grande de cariño hacia mí y me lo hizo notar el día de los festejos. Es algo que me recuerda la gente todos los días".
¿Qué importancia le das a ese título?
"Creo que no tengo la necesidad de poner un título por encima del otro, tampoco es que gané 20 títulos. Los poquitos que tengo los disfruté todos por igual, obviamente algunos como éste, la Liga MX (Apertura 2019) o el campeonato con Chicago (2006) en donde yo fui más partícipe, me puedo sentir más contento. Pero la felicidad de salir Campeón la sentí en todos lados por igual".
¿La Concachampions ante Tigres es la más importante de la historia del club?
"Veo que están con esa disputa. Yo no tengo la necesidad de elegir, tampoco veo por qué hay que elegir qué título vale más. No estás compitiendo con otro equipo. Sin ir más lejos nuestro rival de toda la vida no tiene un título internacional; nosotros tenemos cuatro y estamos eligiendo cuál es más importante. No me interesa saber cuál es, eso es algo que le queda a la gente. Prefiero disfrutar que desde que estoy en Monterrey pudimos ganar todo: Concachampions, Liga MX y Copa MX".
¿Qué significa dar la vuelta en el estadio Azteca?
"Fue hermoso por cómo se dio, por cómo veníamos y porque si no salíamos campeones se iban a olvidar rápido de todo lo bueno que hicimos en el Mundial de Clubes. Haber salido Campeones en el Azteca fue la frutilla del postre. Nos costó muchísimo ese semestre, arrancamos mal y sin darnos cuenta nos relajamos después de ganar la Concachampions y nos costó llegar a la Liguilla. Una vez ahí, hicimos un equipo muy poderoso y fuimos justos Campeones. De no ser así, no se le hubiese dado el valor a todo lo que hicimos en el Mundial que fue grande para México, no sólo para Monterrey. Estuvimos a la altura del poderoso Liverpool y eso es algo que tiene que invitar a todos los equipos a ilusionarse con ir, pelear y llegar a la final".
¿Sentiste que la Final con el América se les escapaba?
"Sí, lo sentíamos todos. Más allá de lo bien que estaba jugando América nosotros no estábamos en el partido. No encontrábamos cómo responder a esa avalancha de América, pero nos dejaron con vida. Ellos erraron bastante en el primer tiempo y en el segundo, sin ser una luz, tuvimos una levantada que alcanzó para llevar el partido al alargue. Ahí ellos se cayeron muchísimo, si bien el partido estaba parejo se notó que nosotros estábamos más fuertes".
¿Hubo algo que les dijo el Turco para que cambien la cara en el entretiempo?
"Nos dijo el Turco y mucho no hacía falta. Entendíamos que nos quedaban 45 minutos no sólamente para cambiar la cara, sino para hacer algo para pelearle al América la Final. En ese momento sentíamos que no estábamos haciendo nada. Si perdíamos, teníamos que perder por lo menos peléandola. No le encontrábamos la manera".
¿Qué les faltó para ganarle a Liverpool?
"Poco y nada. Creo que hicimos todo. Nadie se guardó nada, nadie jugó con temor, todos jugaron sueltos. Después ellos terminaron sacando diferencia con jerarquía. Le llegamos por todos los lugares que se le podía llegar al Liverpool, pero ellos tienen un animal en el arco, es una bestia ese arquero. En el final del partido sacan la diferencia con jerarquía, no veo errores en ninguna jugada, simplemente son el Liverpool, el mejor equipo del mundo. Si bien los tuvimos contra las cuerdas, nos ganaron bien".
¿Cómo fue marcar a jugadores como Mohamed Salah, Sadio Mané y Roberto Firmino?
"Fue muy motivador. Más allá de haber enfrentado a estas figuras nunca dejamos que nos ganara el miedo. Permitimos que haya nervios comunes como en otros partidos y después nos ilusionamos con ganar el partido. Si nosotros estuvimos cerca fue porque nos creímos que le podíamos ganar. Nosotros los defensores hicimos un muy buen partido marcando a estas bestias y me fui muy contento. Conforme no porque no pudimos ganar, pero no me reprocho nada".
¿Algún jugador del Liverpool los felicitó por el partido que hicieron?
"No recuerdo si hablaron con algún compañero, yo personalmente no hablé con nadie".
¿Te llevaste alguna playera?
"Sí. La idea sinceramente no era llevarme la camiseta de Salah, yo lo que quería era que se sacara una foto con mi hijo más grande. Nosotros clasificamos al Mundial 6 meses antes que se jugara y Liverpool también, entonces mi hijo ya sabía. Estuvo 6 meses pensando en que se iba a sacar una foto con Salah, pero es imposible. A la cancha y a los entrenamientos sólamente ingresa la gente acreditada, no entra ni un familiar. Entonces le pedí la camiseta para él y me la dio, un fenómeno".
¿Qué tan importantes fueron y son las figuras argentinas en Monterrey?
"Monterrey es un equipo que trae bastantes argentinos y por lo menos desde que estoy yo, hace 4 años, los planteles siempre tienen varios argentinos. Hasta en el cuerpo técnico. Supongo que todos los que fueron pasando dejaron buena huella, no sólo en lo futbolístico, sino en cómo somos como personas. Eso es fundamental para que el club siga confiando en nosotros.
Mi trabajo y todo lo que hago en Monterrey es para beneficio mío, del club y también para los que vienen después. No sirve de nada que yo viniera a otro país a hacer cag$%# y a ser egoista, termino cerrándole la puerta a los que vienen después. Esta Liga es muy linda, muy competitiva. Monterrey es hermoso y ojalá que siga confiando en los argentinos".
¿Qué significan para el club Antonio Mohamed y Rogelio Funes Mori?
"El Turco ya tiene una vida acá en México. Conoce el fútbol mexicano de pies a cabeza, mejor que al fútbol argentino. Sabe todo. Acá la gente lo respeta muchísimo y le faltaba el torneo con Monterrey. Era la espina que tenía clavada y se la sacó en diciembre. Es un tipo que se hace querer muy fácil, es muy cariñoso y tiene un ida y vuelta muy bueno con la gente. Eso ayuda al equipo
El Melli está encaminado para ser el goleador histórico del club. También hizo su carrera muy importante en México. No sé que tendrá pensado en la cabeza pero tiene muchísimo para dar todavía en Monterrey, son dos personas muy queridas".
¿Con qué equipo argentino compararías a Rayados?
"Lo comparo con River porque Rayados es una filial de River. Más allá de que al club le guste tener argentinos en los planteles, la gran mayoría pasamos por River. Si te pones a pensar: Barovero, Funes Mori, Carlos Sánchez, Kranevitter, Vangioni, JP Carrizo, yo. Hasta el mismo Director Deportivo se ríe y nos habla siempre de River"
¿Con qué Clásico argentino compararías el Clásico Regiomontano?
"No sé con qué Clásico, pasa que acá el fútbol se vive muy diferente. El Clásico de Monterrey es muy apasionante y la gente va mezclada a la cancha. Y no pasa nada. La gente es muy respetuosa y sabe muy bien cuáles son los límites. Cuando pasa algo, la Liga y los clubes se encargan de sacarlo de raíz.
Es muy difícil compararlo. Una vez escuché que lo querían comparar con un Boca - River. Pero no, es imposible. Eso es algo único en el planeta. El Monterrey - Tigres es un Clásico muy lindo y muy especial. No sé cómo se vivirá el América - Chivas, pero el Regio no es el Clásico mexicano en cuanto a espectáculo, está ahí".
¿Te sorprende que Monterrey y Tigres sean más apoyados que América y Chivas en los partidos?
"En la actualidad somos (los Regios) los mejores equipos y tenemos los mejores planteles. Somos los equipos que siempre están en la pelea. Si no es la Liga, es la Concachampions o la Copa MX. Más allá de cualquier altibajo siempre estamos ahí peleando. Por lo que yo voy conociendo de fútbol mexicano, hoy no me sorprende. Después, de historia mucho no puedo hablar".
¿Si pudieras llevarte un jugador de Tigres a Rayados cuál sería?
"(Gonzalo) Marinelli, del Tigre de Argentina (entre risas). De Tigres de acá no, ninguno. Los de Tigres son muy Tigres y nosotros somos muy Rayados. No recuerdo ahora si hay muchos jugadores que hayan pasado por los dos clubes, pero yo no veo un jugador nuestro jugando en Tigres así que supongo que ningún jugador de ellos jugaría acá".
¿Cómo es enfrentar a André-Pierre Gignac? ¿Le agrega especial al Clásico?
"A la Liga (le agrega especial). Cuando vienen jugadores de la talla de él y se lo toman en serio. No sé si todos vienen y se lo toman en serio, por ahí alguno que otro viene a vacacionar. No lo digo por nadie en especial, pero viene un europeo a jugar a México y uno espera muchísimo de ellos. Por lo que veo Gignac se lo tomó en serio, hizo las cosas bien y sigue siendo competitivo desde que llegó. Eso a nosotros nos motiva cada vez que nos enfrentamos".