En la Final de la Copa de Portugal disputada en el estadio Ciudad de Coímbra, Porto superó por 2-1 a Benfica y se consagró Campeón del torneo. Un doblete de Chancel Mbemba hizo posible esta hazaña: los Dragones jugaron con 1 futbolista menos durante casi una hora de juego.

 

Desde el minuto 0 el encuentro tuvo un gustito especial: se trataba ni más ni menos que del Clásico más importante del país en el duelo decisivo por el trofeo. Eso explica lo cerrado que estuvo en los primeros momentos y con la pasión con la que se jugó. 

Chancel Mbemba, con su doblete, fue la gran figura de la Final (Getty Images)

Hubo una jugada que cambió totalmente el rumbo del partido y se dio a los 38 minutos de la primera etapa. A Luis Fernando Díaz se le escapó la pata y metió un patadón que le valió la segunda tarjeta amarilla y la expulsión correspondiente.

 

 

 

 

Eso no impidió que los Dragones salgan a jugar el segundo tiempo decididos a llevarse el título. Tan sólo a los 2 minutos y tras un enorme error de Odisseas Vlachodimos, Chancel Mbemba anotó el 1-0 de cabeza que significó un baldazo de agua congelada para las Águilas. Diez minutos después, Porto fue con la misma fórmula y volvió a lastimar a Benfica. Centro y enorme cabezazo de Mbemba, la gran figura de la noche, para quebrar con la resistencia del portero y establecer el 2-0 para su equipo

 

 

Uno de los puntos más altos fue Jesús Tecatito Corona, quien realizó un sacrificio enorme por la banda derecha y tuvo que ser reemplazado 10 minutos del final por una contractura. Justo después de su salida, Carlos Vinicuis descontó de penal y le agregó emoción al Clásico, aunque no les fue suficiente. Lo pudieron haber igualado a los 91 minutos, pero el zurdazo de Jota no quiso entrar y pegó en el poste derecho de Costa. 

 

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De esta manera, el Porto obtiene un nuevo título y se declara como el Rey de Portugal. Un nuevo título para Tecatito, Mateus Uribe y Agustín Marchesín, quienes viven un presente de ensueño.