James Rodríguez volvió a ser titular en el partido que enfrentó a Everton contra el Rotterdam, en la tercera ronda de la FA Cup, juego que se tornó complicado porque tuvo que ser necesario jugar tiempo extra de desempate.
El colombiano se destacó ya que hizo la asistencia para el gol de la victoria. James frotó la lámpara y con todo su talento hizo un tremendo pase para dejar solo a Abdoulaye Doucouré solo frente al arquero y lo venció fácilmente.
Sin embargo, su juego fue opaco y, además, tuvo mala suerte, ya que luego de recibir un balonazo terminó con la nariz rota y tuvo que ser atendido durante unos minutos fuera de la cancha para controlar el sangrado.
Yerry Mina, el otro colombiano del Everton, fue suplente e ingresó para el segundo tiempo y tuvo una actuación destacada. Pero, como cosa curiosa, tambien recibió un golpe por parte de un rival, que le rompió una de sus cejas.
Al final del encuentro, el zaguero tuvo que terminar el encuentro con una venda en su cabeza para evitar que le saliera sangre y poder continuar en el campo normalmente.